Es una enfermedad inflamatoria que afecta fundamentalmente a las articulaciones de la columna vertebral.

Provoca hinchazón entre las vértebras, que son los discos que forman la columna vertebral, y las articulaciones entre la columna y la pelvis y puede afectar otras articulaciones. La más común de estas enfermedades es la espondilitis anquilosante, que afecta principalmente la columna. Aunque algunos especialistas han clasificado esta enfermedad de la siguiente manera: espondiloartritis axial, que mayormente afecta la columna y las articulaciones de la pelvis. espondiloartritis periférica, que perjudica en su mayoría brazos y piernas y la espondilitis anquilosante.

La enfermedad es más común en los hombres y suele comenzar al principio de la edad adulta. Si el especialista reumatólogo sospecha que el paciente padece una espondilitis anquilosante se realizará una radiografía de la columna vertebral y de la pelvis. Y a través de una resonancia magnética usa ondas de radio y un campo magnético potente para brindar imágenes más detalladas de los huesos y los tejidos blandos.

Causas:

Las causas no se han determinado aún, se siguen estudiando los factores que intervienen en esta enfermedad y su evolución. Por lo tanto, tampoco se puede prevenir.

Sus Síntomas:

Los síntomas incluyen flexibilidad reducida en la columna vertebral que tiene como consecuencia una posición jorobada hacia adelante. También es frecuente experimentar dolor lumbar y articular. El dolor lumbar inflamatorio puede extenderse hacia las nalgas, parte posterior del muslo y puede tener un carácter alternante. El dolor espinal, en cualquiera de sus localizaciones se acompaña de una disminución global de toda la capacidad de movimiento de la zona afectada.

Tratamiento:

Consiste en el uso de medicamentos o fisioterapia. En pocas ocasiones, requiere cirugía.

No se puede curar, pero los tratamientos médicos pueden ayudar a aliviar el dolor y la rigidez, e incluso detener o retrasar la progresión de la afección.

Recomendaciones:

Se recomienda hacer varios tipos de ejercicios:

  • Estiramientos.
  • Movilidad articular.
  • Fuerza y resistencia. Ejercicios posturales.
  • Ejercicios de respiración.
  • Ejercicios aeróbicos.
  • Nadar.
  • Caminar 30 min diarios.

Además, se recomienda que la persona duerma preferiblemente con las piernas estiradas, en lugar de encogidas y mejor bocarriba que de lado. En el trabajo, en lo posible cuida tu postura evitando permanecer mucho tiempo sentado o en posiciones que sobrecarguen tu espalda.

No comer: Productos procesados, embutidos, enlatados y refinados. Las grasas saturadas procedentes de fuentes animales como la mantequilla, manteca de cerdo, tocino y carnes rojas y las grasas trans (abundantes en fritos, comidas rápidas, productos procesados) que son perjudiciales para su salud.

No se recomienda en casos de espondilólisis y espondilolistesis los ejercicios abdominales con incorporación de tronco o elevación de piernas estando estirados.

Antes de paralizar los medicamentos y modificadores biológicos consulte a su médico, debido a la probabilidad de recurrencia de los síntomas.

https://medlineplus.gov/spanish/ankylosingspondylitis.html#:~:text=La%20espondilitis%20anquilosante%20es%20un,personas%20puede%20afectar%20otras%20articulaciones.

https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/ankylosing-spondylitis/diagnosis-treatment/drc-20354813

https://www.topdoctors.es/diccionario-medico/espondilitis