Una persona adulta tiene  aproximadamente 206 huesos, de los cuales 53 están en el pie. Los bebés nacen con menos huesos y éstos son más blandos y van endureciendo con el paso del tiempo. Cuando los huesos sufren alguna ruptura, se pueden reparar a sí mismos de una forma asombrosa. Sólo con la ayuda de un poco de calcio extra, pueden volverse a recuperar.

Conoce más sobre la salud y tu bienestar en Pharmamedic.